Suspendido

La lluvia de vez en cuando es necesaria ; abril paso de largo olvidando llorar, pausando el hastió o mejor dicho decosntruyendolo en usual monotonía; la sucesión de los pasos y esa visión de Titarenko graficando los días, estirándolos, volviendo al universo borroso mientras yo sigo estática; el grito es silencioso, el sonido atragantado, la imagen que no tiene como encontrar su rumbo; mis letras>> (suspiro)<< que haría sin mis letras; caminan a mi ritmo, me permiten respirar y aun así no siempre pueden salir; la hoja en blanco es dicotómicamente alivio y sentencia,  su procesión repiqueteante en el teclado hace eco de los pasos del corredor de la muerte.

Necesito una gota prodigiosa, el aroma a tierra húmeda, tu caricia que siempre se presenta como brisa del sur, mi asilo aun intacto entre tus brazos, la letra hebrea tatuada en mi muñeca y  ese refugio en que no debo dormir con un ojo abierto; la guerra aun sigue en pie, es solo el ojo del tornado aparententando una calma  auspiciosa. Se que mis piernas cederán, que el aire dejara de entrar involuntariamente a mis pulmones, que el calor y el frió confundirán mi tacto, se  a "que" y a "quienes" me enfrento; no te necesito, pero aun así te quiero a mi lado.

Tienes que llegar con ella, suave o tormentoso, pero llegar con ella, con su tintineo sobre el tejado y su luminosa quietud, depositando prismas y textura a la noche como “el ojo de Paris”;  a contratiempo como los bajos del jazz que azulinos pintan la estancia; así dejare que descanse mi ejercito en el infinito contenido en estos puntos suspensivos...
Slow

Occasional rain is necessary; April passed by forgetting to cry, pausing the boredom or rather declining it in usual monotony; the succession of the steps and that vision of Titarenko graphing the days, stretching them, returning to the blurred universe while I remain static; the scream is silent, the choked sound, the image that has no way to find its way; my lyrics >> (sigh) << what would I do without my lyrics; they walk at my pace, they allow me to breathe and yet they can't always get out; the blank sheet is dichotomically relief and sentence, its rattling procession on the keyboard echoes the steps of the death row.
I need a prodigious drop, the aroma of wet earth, your caress that always presents itself as a breeze from the south, my asylum still intact in your arms, the Hebrew letter tattooed on my wrist and that refuge in which I must not sleep with an open eye; the war is still standing, it is only the eye of the tornado appearing auspicious calm. I know that my legs will give way, that the air will stop entering my lungs involuntarily, that the heat and the cold will confuse my touch, I know "what" and "who" confronted me; I don't need you, but I still want you by my side.

You have to arrive with it, soft or stormy, but arrive with it, with its clink on the roof and its luminous stillness, depositing prisms and texture at night as "the eye of Paris"; in reverse as the jazz bass that blue paint the room; so I will let my army rest in the infinite content in these ellipses ...