viernes, 9 de noviembre de 2012

volar sin alas

Se acuerdan esa sensación como de vació en el estomago, esa de montaña rusa, en la  que la respiración parece parar , los latidos acelerarse, y uno quiere gritar; esa misma sensación que antecede al primer beso, cuando sabes que en cualquier momento va a pasar; la electricidad entre los dos genera esa energía mágica en el ambiente y hace que una boba sonrisa aparezca en tu rostro; las mejillas te queman por dentro y muchas veces se ven rubicundas por fuera, te tiemblan las piernas , realmente todo el cuerpo, pero tu cabeza sigue racionalizando pretendiendo controlar la situación, antes que lo inevitable suceda y entonces cuando uno deja que las cosas pasen, lo ultimo que ves antes de cerrar los ojos y fundir tus labios con los de el, son sus ojos, que te miran como si fueras la primera y ultima mujer que vio en su vida; para que todo tenga al final sentido, y uno simplemente sea libre para volar sin alas

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