Tu color es como el del sol
acariciando la arena blanca
de las tarde de Rio.
Tu sabor es a como el de la gente
calida, cariñosa
sabrosa y unica
recordando todo el año
que en febrero el mundo los mirara
como ellos la ven cada madrugada.
Tu olor es a a humedad que baja del morro
colorido doliente podre
y feliz como aquellos
que de el hicieron su hogar
verde desde la dulce cima del pan
viendo esa cuidad que simplemente uno ama.
Tu gusto es de salitre penetrante y cebada
caliente como los dias
y santo como el redentor que con los brazos
abiertos te cuidad desde la cima.
Bossa Nova, hoy por fin entendi
que sabes, oles, te ves y sentis
como Rio de Janeiro
El arte... es mi razón, mi brújula, el solitario y estoico Faro que ilumina mi camino, la canción que suena en la Radio desde los suaves acordes de Drexler y las lágrimas que corren por mi mejilla al tratar una vez más de agradecerle; a esta Quimera fantástica, a mi vivir, a mi amar, a mi decir, a mi libertad pura y pacifica ondeante en el viento, un simple tributo a aquello gracias a lo que vivo y de lo que nunca pensé vivir.
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